Tras la primera parte, publicada hace un mes y medio, hoy vamos con la segunda parte de esta serie de circuitos urbanos. Los trazados que vamos a comentar serán los que tengan más de cinco años de experiencia, los más importantes en Estados Unidos y todos los españoles.
La Isla de Notre-Dame se creó en 1967, allí se iban a construir los pabellones de la Exposición Universal de Montréal. Gracias a la popularidad de Gilles Villeneuve, en 1978 se inauguró el circuito de la Isla de Notre-Dame, un nombre que se cambió al de "Circuit Gilles Villeneuve" cuando el canadiense murió en 1982. El Gran Premio de Canadá de Fórmula 1 se ha disputado desde entonces, excepto en dos ocasiones: en 1987, cuando las cerveceras Labatt y Molson se disputaron en los juzgados el patrocinio legal; y en 2009, año en el que no se garantizó la viabilidad económica de la carrera. También se celebra el Gran Premio de Montréal, en el mes de agosto. La Fórmula Atlantic organizó la cita entre 1978 y 2006, y la Champ Car también le acompañó entre 2002 y 2006. Desde 2007, la Nationwide Series, la NASCAR canadiense y la Copa Rolex de resistencia han sido las categorías principales de dicho Gran Premio.
Oporto fue una de las primeras grandes ciudades en probar suerte con un circuito en sus calles. La primera carrera realizada data del año 1931 y se disputó en los alrededores de la Avenida da Boavista, la más larga de la ciudad. En 1950 el trazado se reconfiguró y durante la década se realizaron diversas pruebas de carácter nacional e internacional. La Fórmula 1 también forma parte de la historia del Circuito da Boavista, ya que el Gran Premio de Portugal se celebró allí en 1958 y 1960. Tras muchos años de ostracismo, las instituciones municipales revivieron el circuito en 2005, con la celebración de un evento de coches históricos. Desde entonces cada dos años se celebra el Gran Premio de Oporto, que además de coches históricos acoge la prueba portuguesa del Campeonato Mundial de Turismos.
Albert Park es un parque situado a tres kilómetros del centro de Melbourne. El Gran Premio de Australia se celebró allí en 1953 y 1956. Pero cuando el circuito de Adelaida dejó de ser la sede del Gran Premio por no ser lo suficientemente seguro, Melbourne revivió el circuito y decidió organizar la carrera, trasladándola del mes de noviembre al mes de marzo. Desde 1996, el circuito, que bordea el lago del parque, ha permanecido en el calendario, casi siempre como primera prueba de la temporada. La V8 Supercars también organiza una carrera anual en el mismo fin de semana. El circuito puede catalogarse como semiurbano, ya que la mayoría de curvas tienen escapatorias de hierba o de grava.
Entre 1990 y 2004 Vancouver, la gran ciudad del oeste de Canadá, fue la sede de una carrera de Champ Car, acompañada por el Campeonato Atlántico y la Indy Lights. La carrera se celebraba en septiembre, pero en sus últimos años de existencia pasó a organizarse a finales del mes de julio, alrededor del principal salón de la Exposición Universal de 1986. La carrera tuvo dos trazados distintos, aunque de longitud similar: el primero se utilizó entre 1990 y 1997, mientras que el segundo estuvo activo entre 1998 y 2004. Se convirtió en un clásico del calendario, pero también fue polémico, ya que se hicieron muchos debates sobre si la presencia de la carrera mejoraba o empeoraba la imagen que daba la ciudad. Al Unser júnior (4), Michael Andretti y Paul Tracy (3 cada uno) fueron los pilotos más victoriosos en este trazado.
El circuito urbano más conocido de Sudamérica está situado en la ciudad balneario de Piriápolis, en Uruguay. Este trazado no permite muchos errores, ya que los muros están muy cerca y se utilizan otras calles como escapatorias. La primera edición se celebró en 1994, con carreras de turismos y la Fórmula 3 sudamericana como cabeza de cartel. Volvió a celebrarse entre 1996 y 2003 y desde 2006 lo hace de forma ininterrumpida. La Fórmula 3 se fue en 2001 pero volvió en 2009, compartiendo escenario con la Fórmula Vee y la Fórmula Chevrolet. En cuanto a los turismos, se han organizado carreras con coches antiguos de Superturismo y de la categoría de Turismo Libre, e incluso carreras de escarabajos.
Otra gran ciudad que tuvo la oportunidad de organizar carreras en sus calles fue Wellington. La famosa Wellington 500 se celebró entre 1985 y 1996, y tuvo muchos cambios de trazado durante su existencia. Los turismos fueron los únicos coches que rodaron en esta pista, en una carrera que no puntuó para ningún campeonato pero que contó con el apoyo del público y un gran número de inscripciones de pilotos europeos, australianos y neozelandeses. En 1987, el Mundial de Turismos disputó una de sus citas en la ciudad, con victoria para los alemanes Klaus Ludwig y Klaus Niedzwiedz al volante de un Ford Sierra. En 2006 se propusieron dos nuevos trazados para revivir la carrera, pero la iniciativa no tuvo éxito.
En Estados Unidos los ayuntamientos de las grandes ciudades encuentran en una carrera urbana una buena manera de darse a conocer. Y más de un alcalde ha podido hacerse ver, aunque no todas las aventuras han tenido un final feliz. El de Long Beach ha sido el Gran Premio de mayor éxito, pero hay muchas más ciudades que han intentado organizar carreras callejeras, siendo Detroit la que más veces lo ha intentado.
Detroit organizó una de las carreras del primer campeonato sancionado por la AAA, en 1905; dicha carrera se disputó en el óvalo de tierra de Grosse Pointe. En otro óvalo de tierra, el de Michigan State Fairgrounds, se corrió en tres etapas: entre 1928 y 1932, desde 1949 hasta 1953 y por última vez en 1957. Entre 1982 y 1991, el Gran Premio de Detroit se corrió en un circuito urbano alrededor del Renaissance Center, un conjunto de rascacielos. La Fórmula 1 permaneció hasta 1988, siendo reemplazada por la CART (antigua Champ Car) los tres últimos años. Belle Isle, un parque de las afueras de la ciudad, albergó la carrera de CART entre 1992 y 2001; la IndyCar regresó a dicho escenario en 2007 y 2008. La crisis económica y sus efectos en la industria automovilística de Detroit provocaron que la cita se cayera del calendario.
Otra ciudad con tradición de carreras en el este de Estados Unidos es Cleveland. La ciudad más conocida del estado de Ohio fue durante 26 años la sede de una carrera tan célebre como curiosa. El Gran Premio de Cleveland se disputó en un circuito formado por las pistas del aeropuerto Burke Lakefront, en las afueras de la ciudad. La CART y su sucesora, la Champ Car, fueron cabeza de cartel entre 1982 y 2007, en una de las pocas carreras que contó con el apoyo unánime de los espectadores y de los equipos. Desde la fusión con la IndyCar la carrera no se ha vuelto a celebrar. Pero se ha especulado con un posible retorno a partir de 2012, igual que con otras ciudades como Detroit o Houston, que ya tuvieron un circuito urbano en su día.
La ciudad de St. Petersburg, en Florida, también ha intentado organizar una carrera en varias ocasiones. El primer circuito se preparó cerca del puerto, y en él se disputaron carreras de Trans-Am entre 1985 y 1990. En 1996 y 1997 la Trans-Am volvió en un segundo circuito situado en los alrededores del estadio Tropicana, usando parte del aparcamiento del mismo. Las carreras no regresaron hasta el año 2003, cuando la Trans-Am y la Champ Car utilizaron una versión modificada del circuito original. Después de suspenderse el Gran Premio en 2004 por culpa de una pelea entre los promotores, en 2005 la IndyCar celebró en St. Petersburg su primera carrera fuera de un circuito ovalado, que se ha mantenido hasta el día de hoy. Entre 2007 y 2009 la American Le Mans Series (ALMS) también programó carreras de resistencia en la ciudad.
Hasta tres circuitos urbanos diferentes se han utilizado en Miami. En el Bayfront Park, situado en el distrito financiero, el IMSA GT, campeonato de coches de Gran Turismo y de prototipos, corrió entre 1983 y 1985; el circuito volvió a la acción en 2002 y 2003, cuando la CART y la ALMS organizaron el Gran Premio de las Américas. Tamiami Park, un parque situado en el área metropolitana de Miami, también tuvo carreras de CART desde 1985 hasta 1988, incluyendo dos Desafíos Marlboro (carrera de estrellas no puntuable). Y alrededor de otro parque del distrito financiero, Bicentennial Park, el campeonato IMSA GT organizó carreras entre 1986 y 1993, además de la primera cita de la CART en la temporada 1995.
Denver, la ciudad más grande y representativa de Colorado, es una de las urbes más importantes del oeste de Estados Unidos que ha intentado montar una carrera en sus calles en más de una ocasión. El óvalo de tierra Centennial Park fue la sede de dos carreras del campeonato de la AAA, en 1951 y 1952. Durante la década de los 90 se produjeron los primeros contactos de Denver con la CART. El Civic Center, un parque situado al sur del distrito financiero albergó dos carreras en 1990 y 1991, ambas con victoria para Al Unser júnior. Y entre 2002 y 2006, una parte del aparcamiento y los alrededores del Pepsi Center (un pabellón multiusos) fueron utilizados como circuito, con dos victorias para Bruno Junqueira y Sébastien Bourdais y una para A. J. Allmendiger.
Otro ayuntamiento que lo intentó pero no llegó a buen puerto fue el de Dallas. La ciudad tejana organizó un Gran Premio de Fórmula 1 en 1984, que pasó a la historia por disputarse bajo un calor sofocante y con un asfalto que se levantaba a trozos. Keke Rosberg ganó, mientras que Nigel Mansell se desmayó intentando empujar su coche sin gasolina hacia la línea de meta con 40º de temperatura ambiente. Desde entonces, la Trans-Am ha organizado el Gran Premio varias veces. En 1988 siguió en el mismo trazado, pero entre 1989 y 1991 se trasladaron a Addison, una ciudad de las afueras de Dallas. Los últimos intentos tuvieron lugar en 1993, 1994 y 1996, cuando se montó un circuito urbano alrededor del Reunion Arena.
El complejo deportivo de Meadowlands, situado en East Rutherford (Nueva Jersey), siguió la moda de la época y también intentó organizar una carrera alrededor de un aparcamiento, concretamente el del Giants Stadium. La carrera prometía desde el principio, pero a pesar de un cambio de circuito los pilotos empezaron a criticar el trazado, igual que los aficionados y los periodistas. Finalmente, el evento se canceló después de la prueba de 1991. Al año siguiente se intentó llevar la carrera a Manhattan, pero no se pudo gracias a las políticas anti-tabaco de David Dinkins, alcalde de Nueva York en esa época. El circuito es uno de los pocos donde han ganado tanto Mario Andretti como su hijo Michael.
En España no han existido muchos circuitos, ya que el automovilismo no ha sido un deporte pujante. Pero han existido algunos intentos de circuitos urbanos en nuestro país, sobre todo en Cataluña y en el País Vasco.
Lasarte, una población de la provincia de Guipúzcoa, albergó varias carreras de renombre en los años 20 y 30. El circuito de Lasarte medía 17 kilómetros y atravesaba varias poblaciones como Hernani, Andoáin o la propia Lasarte. Desde 1923 hasta 1930 organizó el Gran Premio de San Sebastián, fue nombrado Gran Premio de Europa de forma honorífica en 1926 y fue la sede del Gran Premio de España entre 1926 y 1930, y de nuevo entre 1933 y 1935. Pero la proclamación de la Guerra Civil paró todas las actividades y no se volvió a correr, aunque el trazado se utilizó para el Mundial de Ciclismo del año 1965.
El circuito de Montjuïc fue uno de los precursores en cuanto a circuitos urbanos se refiere. La primera competición en esta montaña tuvo lugar en 1932. El Gran Premio Penya Rhin se disputó entre 1933 y 1936. A partir de 1969, Montjuïc albergó el Gran Premio de España en años impares, alternándose con el circuito del Jarama. Los acontecimientos se sucedieron hasta el año 1975, en el que hubo un intento de boicot por parte de los pilotos. En la carrera, Rolf Stommelen perdió el alerón trasero en la recta de meta y se estrelló, provocando la muerte de cuatro espectadores y un fotógrafo. Ese hecho hizo que la Fórmula 1 no regresara a Barcelona. Las 24 horas de motociclismo, que habían empezado a disputarse en 1955, se suspendieron de forma definitiva en 1986, después de una serie de accidentes mortales.
Pedralbes fue el otro gran circuito urbano de la ciudad de Barcelona. Aunque las motocicletas tuvieron su protagonismo, fueron los coches quienes dieron más empuje al circuito del barrio. Dos Grandes Premios de Fórmula 1 se disputaron en el circuito, con victoria para Juan Manuel Fangio en 1951 (que además ganó el título en esa carrera) y Mike Hawthorn en 1954. El Gran Premio Penya Rhin se celebró en 1946, 1948, 1950 y 1954, con coches de Grand Prix los dos primeros años, de Fórmula 1 el tercero y coches de Gran Turismo el último año. El circuito se cerró en 1955, por culpa de las restricciones de seguridad impuestas a raíz del grave accidente de Le Mans de ese mismo año, en el que murieron 84 personas.
En 2005 una ciudad española de tamaño se aprovechó del efecto del automovilismo para crear un nuevo evento. Bilbao fue la sede de una prueba de las World Series by Renault. Las carreras las vencieron pilotos que se han dado a conocer más tarde. En la Fórmula 3.5, Robert Kubica ganó la primera carrera, mientras que la segunda se la llevó Will Power, subcampeón de la IndyCar el año pasado. Y en la Eurocopa 2.0, los ganadores fueron Michael Ammermüller y Adrian Zaugg, dos hombres que pasaron sin mucho éxito por la GP2. La falta de acuerdo entre los políticos obligó a suspender la cita para años posteriores, a pesar de estar contentos con los 140000 espectadores acumulados durante el fin de semana.
Y por último, Valencia. La ciudad del Turia es la sede del Gran Premio de Europa de Fórmula 1 desde el año 2008, cuando se llegó a un acuerdo para hacer posible un segundo GP en España. Sebastian Vettel ha ganado la carrera los dos últimos años. A veces se ha considerado al Valencia Street Circuit como un circuito costoso e innecesario, debido a la cercanía del trazado de Cheste. Pero con el paso del tiempo, Valencia se ha reafirmado como un buen sitio para organizar un fin de semana de Fórmula 1, hasta llegar al punto de rumorearse la marcha de Montmeló del calendario. La batalla por el Gran Premio de España entre Valencia y Montmeló aún no ha acabado.