martes, 2 de agosto de 2011

Los hombres tienen nombre: Romain Grosjean

La GP2 es una categoría muy conocida en el mundo del automovilismo. Desde que se creó en 2005, 18 pilotos han subido a la Fórmula 1 gracias a su buen papel en esta disciplina (o también por culpa de un patrocinador fuerte). Pero no todos los pilotos que suben hacen un buen papel. Nico Rosberg, Lewis Hamilton y Heikki Kovalainen son pilotos consolidados pero hubo otros hombres como Scott Speed o Kazuki Nakajima que no parecieron enterarse donde estaban y fueron despedidos por falta de resultados. Pero el caso de nuestro piloto de hoy es extraño: se fue de la GP2 como líder, las pasó canutas en la Fórmula 1, volvió de puntillas a la GP2 y ahora es un líder sólido. Hay veces en las que volver hacia atrás puede ser muy efectivo.

Romain Grosjean nació en Ginebra en 1986. Desde pequeño destacó en los karts, el vehículo ideal para que cualquier aspirante a piloto profesional se foguee. Fue campeón de Francia en el año 2001 y al año siguiente compitió en la prestigiosa copa de Mónaco de karts, que se disputa en parte del famoso circuito urbano. 2003 fue el primer año de Grosjean en monoplazas y resultó, cuanto menos, productivo. El piloto suizo ganó dos campeonatos: la Fórmula Lista Junior, con el equipo Advance Racing y la Fórmula Renault 1.6 suiza (donde hizo todas las pole position y ganó todas las carreras). A partir de entonces, Grosjean estuvo en diversas Fórmulas Renault con el equipo SG Formula, de nueva creación.

Durante 2004, participó en el Campeonato de Francia de Fórmula Renault 2.0, en el que acabó séptimo con una victoria y cuatro podios. Estuvo en varias carreras de la Eurocopa 2.0, siendo decimoquinto con un quinto puesto como mejor resultado. En 2005 ganó con autoridad el Campeonato de Francia, sumando diez victorias y trece podios. Corrió en cuatro citas de la Eurocopa 2.0, logrando un segundo y un tercer puesto en Valencia que le sirvieron para finalizar en la duodécima posición. Y también participó en su primera prueba de Fórmula 3, el famoso Gran Premio de Macao, en el que acabó en un nada despreciable noveno puesto, teniendo en cuenta que era su debut a los mandos de un Fórmula 3. Todos estos logros convencieron a Renault, que le incluyó en su programa de desarrollo de pilotos (RDD).

El equipo para el que corrió en Macao, Signature-Plus, le contrató para correr la Fórmula 3 Euroseries en  2006. El año fue duro, ya que Grosjean (nacionalizado francés y corriendo bajo licencia gala) solo consiguió un podio y acabó decimotercero. Las tornas cambiaron en el Gran Premio de Pau, donde ganó las dos carreras, hizo la vuelta más rápida en ambas y la pole position en la primera. En las carreras de un día acabó quinto, tanto en el Masters de Zandvoort como en Macao. ART, campeón de la GP2 y de la Euroseries fichó a Grosjean para la temporada 2007. Y el francés ganó el campeonato, con seis victorias, doce podios y una buena dosis de regularidad en su haber. Salió desde la pole position en el Masters, pero caló el coche en la salida y solo pudo ser decimocuarto. Y en Macao fue el mejor piloto de la Euroseries, pero el potencial de los coches de la F3 japonesa y de la británica le impidió ir más allá del octavo puesto.

Romain Grosjean tuvo su primer contacto con la Fórmula 1 en 2008, cuando formó parte del equipo Renault como piloto probador. Siguió con el equipo ART en GP2. En la primera temporada de la serie asiática ganó el campeonato, gracias a sus cuatro victorias. Pero en Europa sufrió más, ya que ART no tenía el coche invencible de otras temporadas. Al final, Grosjean logró dos victorias y seis podios que le valieron para ser cuarto en la clasificación. De cara a 2009, su antiguo rival Nico Hülkenberg le quitó el asiento en ART y fichó por Barwa Addax, el equipo que Adrián Campos le vendió a Alejandro Agag. Sin competir en Asia, empezó el año con dos victorias y un segundo puesto. Y aunque poco a poco fue perdiendo fuelle, podría haber ganado el campeonato si no hubiera sido por la intervención de Renault.
La marca francesa llamó a Grosjean para que sustituyera como piloto titular del equipo a Nelson Piquet Jr., que no dio los resultados esperados y fue despedido de forma tajante. El piloto francés tampoco pudo seguir el ritmo de Fernando Alonso y sufrió con el R29. Logró su mejor resultado en Brasil, donde fue decimotercero, y acabó en una discreta vigesimotercera posición. Aunque no participó en las cuatro últimas citas fue cuarto en la GP2, pero no siguió, convencido de que iba lograr un volante en la Fórmula 1. Al no conseguir dicho volante, se encontró compuesto y sin asiento.

Romain Grosjean volvió a competir bajo bandera suiza en 2010, año en el que corrió en cinco categorías. Empezó en el Mundial de GT1, haciendo un primer y un segundo puesto en Yas Marina y acabando décimo al final en las filas del equipo Matech Competition; también participó en las 24 horas de Le Mans, pero tuvo que retirarse. Siguió en el Auto GP, la antigua Fórmula 3000 italiana. Ganó a pesar de entrar en junio, con cuatro victorias y tres pole position en las filas del equipo DAMS, "filial" de Renault. Fue tercero en la Copa Europea de GTN, una prueba de resistencia disputada en Spa. Volvió a la GP2 en julio, de nuevo con DAMS. Dos terceros puestos le sirvieron para acabar decimocuarto. Y en septiembre fue nombrado piloto oficial de Pirelli, que buscaba alguien experimentado para probar sus nuevos neumáticos de Fórmula 1 preparados para la temporada 2011.

Este año Grosjean tiene un calendario mucho menos ajetreado y bastante más placentero. Además de volver a ser probador de Renault, el equipo DAMS ha mantenido su confianza en él. En la GP2 Asia, ganó el campeonato, con una victoria y dos podios en cuatro carreras. Y en Europa va por el mismo camino. De forma discreta y sin hacer mucho ruido, ya ha ganado cinco carreras y ha logrado varios podios. Todos estos resultados le han consolidado en el liderato por delante de los dos pilotos de Barwa Addax: saca 25 puntos a Giedo van der Garde y 32 a Charles Pic. Y no lo tiene mal para proclamarse campeón en Spa, justo después de las vacaciones de verano, sin tener que esperar a la última cita puntuable en Monza.

Con 25 años en la mochila, Romain Grosjean ha recuperado el buen camino a tiempo. Tras una trayectoria triunfal coronada con seis títulos y un séptimo que está al caer, los cantos de sirena de Renault son más evidentes. De llegar al equipo francés, sustituiría a Nick Heidfeld, que no está dando los resultados esperados, y coincidiría de nuevo con su ex compañero en GP2 Vitaly Petrov. Todo esto siempre y cuando Robert Kubica no pueda conducir un Fórmula 1. En caso contrario, Grosjean igualmente se merece un volante en la máxima categoría, por dedicación, constancia, y talento. Pero veremos si los contables de los equipos punteros piensan lo mismo.

Y el viernes en "Los hombres tienen nombre", Jason Plato, el piloto de turismos británicos por excelencia.

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