En la década de los años 90, no era difícil ver a pilotos europeos en las mejores fórmulas estadounidenses. Las parrillas de salida estaban ocupadas en su mayoría por pilotos americanos, pero también había europeos y una gran legión de brasileños que iban a Estados Unidos a buscar la suerte que no habían encontrado en Europa; muy pocos habían ganado algún título con anterioridad. Hoy en día sucede justo al revés: hay pocos pilotos estadounidenses dispuestos a correr en monoplaza en los circuitos de su país. El último campeón americano en fórmulas fue Jimmy Vasser en 1996. El hombre del que vamos a hablar es otro ejemplo de piloto que no encuentra el éxito en Europa y decide ir a América. De momento no le ha ido mal, pero podría haber formado parte de la lista negra, la de los caídos por culpa de un accidente.
Nacido en Bromley (Kent) en 1983, Mike Conway es un piloto británico que ha seguido los pasos de algunos de sus compatriotas. Cómo no, comenzó en el karting, donde ganó sus primeros títulos: fue campeón británico junior y de Fórmula A. Su primer año en monoplazas fue 2001, cuando participó en la Fórmula Ford junior, logrando ser sexto, con una victoria y dos podios. También formó parte de las Series Invernales, sumando una victoria en Donington Park; ambos hechos los consiguió en el equipo del ex piloto de Fórmula 1 Martin Donnelly. Ese mismo año, sumó un podio en la Eurocopa Fórmula Ford, estuvo en la parrilla del festival de dicha fórmula, donde abandonó y fue invitado a la última carrera de la Fórmula Ford británica. Al año siguiente compitió en esta categoría, con el equipo Van Diemen. No ganó ninguna carrera pero finalizó cuarto, con seis podios.
Fortec Motorsport fue su equipo durante los siguientes tres años. En 2003 acabó cuarto en la Fórmula Renault 2.0 británica, con una victoria en Snetterton y cinco podios. A finales de temporada, logró dos victorias en las Series Invernales 2.0 y fue segundo, además de ser invitado a la última cita de la Eurocopa 2.0. 2004 fue el año de su primer título en monoplazas. Conway ganó la Fórmula Renault 2.0 británica, con 8 victorias y 16 podios en su haber; también participó como piloto invitado en la cita de Donington Park de la Eurocopa 2.0, con un séptimo puesto en la primera carrera y una victoria en la segunda. Su labor durante el año le permitió ser seleccionado para ser candidato al trofeo de McLaren, Autosport y el BRDC, donde perdió ante Paul di Resta.
Mike Conway siguió unido a Fortec Motorsport en la temporada 2005, cuando debutó en la Fórmula 3 británica. Una victoria y siete podios fueron su bagaje, que le permitió acabar tercero en la clasificación final. Y formó parte de las dos carreras de Fórmula 3, pero con resultados discretos: decimotercero en el Masters y decimocuarto en Macao (con Manor Motorsport). 2006 fue un año importante, en el que dio el paso definitivo hacia la élite del automovilismo. Conway cambió de equipo y se fue a Räikkönen Robertson Racing. El cambio fue bueno ya que ganó la Fórmula 3, sumando diez victorias, diez pole position y 16 podios. Entró en GP2, de la mano del equipo DPR, con el que logró dos undécimas posiciones en la cita de Silverstone. Y aunque abandonó en el Masters, ganó en Macao, hecho que le abrió más puertas. La revista Autosport le dio el trofeo de mejor piloto Nacional del año (como participante en un campeonato británico).
En 2007, Super Nova Racing le contrató para correr en GP2. Pero mientras su compañero Luca Filippi se acostumbró a subir al cajón durante la temporada, Conway sufrió bastante para igualar el ritmo, tanto que solo consiguió un podio (segundo en Silverstone). Finalizó la temporada en la decimocuarta posición. De cara a 2008, se enroló en las filas del equipo Trident Racing. Acabó duodécimo, con ocho carreras en los puntos, incluyendo una victoria en Mónaco. En el Principado formó parte del único doblete de Trident hasta la fecha, ya que Conway ganó por delante de su compañero, el holandés Ho-Pin Tung. Conway también fue probador del equipo Honda de Fórmula 1 durante sus dos años en GP2. Pero el británico, que había probado un IndyCar en agosto, se cansó de esperar e hizo las maletas, rumbo a Estados Unidos.
En la estructura del equipo Dreyer & Reinbold Racing superó a todos sus compañeros de equipo a pesar de ser un debutante, e incluso se permitió el lujo de subir al podio en Infineon, donde fue tercero por detrás de Dario Franchitti y Ryan Briscoe. Pero acabó el año en una discreta decimoséptima posición. Siguió en el mismo equipo en 2010, pero en Indianápolis sufrió un accidente espeluznante. Entrando en la tercera curva, Conway no pudo esquivar el coche de Ryan Hunter-Reay, que se estaba quedando sin gasolina. El británico salió catapultado hacia el muro. En el accidente, se rompió la pierna izquierda y se fracturó una vértebra, lesiones que le impidieron competir en el resto de la temporada. Con sus resultados antes del accidente, finalizó en el vigesimoquinto puesto.
Andretti Autosport dio la sorpresa de la temporada fichando a Mike Conway, plenamente recuperado para la temporada 2011. Conway ganó en Long Beach, gracias a una buena estrategia en boxes. Pero desde entonces el piloto británico no da pie con bola y llegó a no clasificarse para las 500 millas de Indianápolis, la carrera en la que estuvo a punto de perder la vida en 2010. En estos momentos ocupa el decimoséptimo puesto. A pesar de su discreta temporada, hay que valorar el trabajo de Conway. No todos los pilotos europeos que buscan empleo en América tienen suerte. El piloto de Kent tiene trabajo, y en uno de los mejores equipos de la IndyCar. Ahora solo tiene que aprovechar los medios y demostrar a la Fórmula 1 que se equivocó al rechazarle.
Y el martes en "Los hombres tienen nombre", Robert Wickens, otro producto rechazado por Red Bull que se sube a las barbas de la marca austríaca.
Fortec Motorsport fue su equipo durante los siguientes tres años. En 2003 acabó cuarto en la Fórmula Renault 2.0 británica, con una victoria en Snetterton y cinco podios. A finales de temporada, logró dos victorias en las Series Invernales 2.0 y fue segundo, además de ser invitado a la última cita de la Eurocopa 2.0. 2004 fue el año de su primer título en monoplazas. Conway ganó la Fórmula Renault 2.0 británica, con 8 victorias y 16 podios en su haber; también participó como piloto invitado en la cita de Donington Park de la Eurocopa 2.0, con un séptimo puesto en la primera carrera y una victoria en la segunda. Su labor durante el año le permitió ser seleccionado para ser candidato al trofeo de McLaren, Autosport y el BRDC, donde perdió ante Paul di Resta.
Mike Conway siguió unido a Fortec Motorsport en la temporada 2005, cuando debutó en la Fórmula 3 británica. Una victoria y siete podios fueron su bagaje, que le permitió acabar tercero en la clasificación final. Y formó parte de las dos carreras de Fórmula 3, pero con resultados discretos: decimotercero en el Masters y decimocuarto en Macao (con Manor Motorsport). 2006 fue un año importante, en el que dio el paso definitivo hacia la élite del automovilismo. Conway cambió de equipo y se fue a Räikkönen Robertson Racing. El cambio fue bueno ya que ganó la Fórmula 3, sumando diez victorias, diez pole position y 16 podios. Entró en GP2, de la mano del equipo DPR, con el que logró dos undécimas posiciones en la cita de Silverstone. Y aunque abandonó en el Masters, ganó en Macao, hecho que le abrió más puertas. La revista Autosport le dio el trofeo de mejor piloto Nacional del año (como participante en un campeonato británico).
En 2007, Super Nova Racing le contrató para correr en GP2. Pero mientras su compañero Luca Filippi se acostumbró a subir al cajón durante la temporada, Conway sufrió bastante para igualar el ritmo, tanto que solo consiguió un podio (segundo en Silverstone). Finalizó la temporada en la decimocuarta posición. De cara a 2008, se enroló en las filas del equipo Trident Racing. Acabó duodécimo, con ocho carreras en los puntos, incluyendo una victoria en Mónaco. En el Principado formó parte del único doblete de Trident hasta la fecha, ya que Conway ganó por delante de su compañero, el holandés Ho-Pin Tung. Conway también fue probador del equipo Honda de Fórmula 1 durante sus dos años en GP2. Pero el británico, que había probado un IndyCar en agosto, se cansó de esperar e hizo las maletas, rumbo a Estados Unidos.
En la estructura del equipo Dreyer & Reinbold Racing superó a todos sus compañeros de equipo a pesar de ser un debutante, e incluso se permitió el lujo de subir al podio en Infineon, donde fue tercero por detrás de Dario Franchitti y Ryan Briscoe. Pero acabó el año en una discreta decimoséptima posición. Siguió en el mismo equipo en 2010, pero en Indianápolis sufrió un accidente espeluznante. Entrando en la tercera curva, Conway no pudo esquivar el coche de Ryan Hunter-Reay, que se estaba quedando sin gasolina. El británico salió catapultado hacia el muro. En el accidente, se rompió la pierna izquierda y se fracturó una vértebra, lesiones que le impidieron competir en el resto de la temporada. Con sus resultados antes del accidente, finalizó en el vigesimoquinto puesto.
Andretti Autosport dio la sorpresa de la temporada fichando a Mike Conway, plenamente recuperado para la temporada 2011. Conway ganó en Long Beach, gracias a una buena estrategia en boxes. Pero desde entonces el piloto británico no da pie con bola y llegó a no clasificarse para las 500 millas de Indianápolis, la carrera en la que estuvo a punto de perder la vida en 2010. En estos momentos ocupa el decimoséptimo puesto. A pesar de su discreta temporada, hay que valorar el trabajo de Conway. No todos los pilotos europeos que buscan empleo en América tienen suerte. El piloto de Kent tiene trabajo, y en uno de los mejores equipos de la IndyCar. Ahora solo tiene que aprovechar los medios y demostrar a la Fórmula 1 que se equivocó al rechazarle.
Y el martes en "Los hombres tienen nombre", Robert Wickens, otro producto rechazado por Red Bull que se sube a las barbas de la marca austríaca.
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